¡Buenas tardes!
Siguiendo con mis mermeladas, hoy os hablo de la mermelada de grosella. Como sabéis, es una baya que crece de un arbusto, y puede ser roja o negra. En mi jardín tengo un grosellero rojo y otro negro. Bueno, el jardinero es mi maridito, yo sólo recojo los frutos.
Si tenéis instagram y a mí añadida, ya habréis visto las fotos. Os las comparto aquí también.
Ésta es mermelada de la grosella roja y la negra mezcladas:
Y ésta es mermelada de grosella roja por un lado, y la negra por otro.
¿Cómo se hace? Pues igual que la mermelada de fresa de la otra entrada, peeeroo... Después de limpiar la fruta y quitar los rabitos y dejarla toda la noche en azúcar para que suelte el jugo...
Nota: Azúcar: Siempre al gusto. He leído que se echa medio kilo de azúcar por kilo de fruta, pero en la fresa sería demasiado porque son más dulces. En las grosellas hace falta más azúcar porque son ácidas.
Luego lo cocemos y lo pasamos por el pasapuré. Con esto quitamos los pellejos, pero las frutas como éstas con muchas pepitas hay que pasarlas por EL CHINO (por el bazar o el restaurante no, que os veo, por el embudo raro con agujeritos que veis en la foto de arriba). Ésto en las fresas o mandarinas no hacía falta.
Tened cuidado al cocerlo, que el enfriar espesa. En la de grosella negra me pasé porque me parecía líquida y luego me quedó que parecía una gominola.
Ya se ha terminado la temporada de grosellas. En septiembre- octubre llegará la de manzanas reinetas...
Seguid disfrutando del verano y contadme qué hacéis vosotras. ¡Besos!
Guau, qué suerte. Yo tengo una amiga que me pasa arándanos que le crecen en la finca de su padres y me encantan!, Las grosellas creo que son más ácidas, pero en mermelada deben estar divinas. Yo a veces hago membrillo, con la thermomix no hay que quitarle las pelas por que tritura todo al moléculas, ja, ja por lo que se hace mucho más fácil el trabajo de hacer el membrillo. Eso sí, me queda rojizo pero de sabor igual que el comprado.
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